domingo, 26 de abril de 2020

Aves de San Juan de Lurigancho, parte 3: Inspiración desde el pasado


Lic. Julio Abanto Ll.
Jorman Cabello Arzapalo


Desde esta entrega tendremos la colaboración de amigos y organizaciones interesados en el tema de aves (Composición fotográfica Julio Abanto con la colaboración de imágenes de Jorman Cabello, 2020).

Desde el pasado hemos sentido una profunda admiración por las aves, quizás el solo hecho que hayan conquistado los cielos y su capacidad de volar han sido fuente de inspiración para la humanidad. Desde la mitología más antigua hasta a la tecnología aérea más moderna sigue sugestionada en ellas.

Para Uwe Carlson, el arte textil de la costa central está inspirado en aves marinas por ser ellas, un indicador de riqueza ictiológica (Carlson: 2010,42), tampoco es raro que el topónimo de lugares importantes lleve el nombre de aves, es el caso de qusqu, que es lechuza o pisqu que significa avecilla. El lingüista Gerardo García Chichas, en su libro “Estudios etnolingüísticos de San Juan de Lurigancho, Jicamarca y Mangomarca (García: 2005), propone que Lurigancho hace referencia a un ave nombrada en los antiguos manuscritos de Huarochirí escritos a principios del siglo XVII, el ave kanchu.

Petroglifo de cerro Cantería que representa un ave rapaz en actitud de iniciar el vuelo (Foto: Julio Abanto, 2006)
Hermosa vasija escultórica del sitio Potrero Tenorio, representa un buho (En Palacios y Guerrero 1992:95)



Según menciona el manuscrito, el kanchu es un pájaro con cuyo plumaje adornaban las casas,  vestidos y sus tocados la gente antigua de Lima.  Esta reseña ha hecho que emprendamos una búsqueda incesante para descubrir cuál es esa ave que le da nombre a nuestro distrito, llegue hasta Cajatambo, a los pies del nevado Diablo Mudo donde existe una quebrada denominada kanchu Huayco, pero sus pocos habitantes no supieron darme mayores referencias, la investigación requiere de paciencia y constancia así que a seguir buscando.

Lo que hemos logrado tener los arqueólogos son buenas referencia de aves en la iconografía prehispánica de nuestro territorio, por ejemplo, la representación más antigua de un ave rapaz se encuentra en una de las rocas de los petroglifos de cerro Cantería, estribación que se sitúa en la zona alta de Canto Grande y cuya antigüedad se estima en 2500 años. También existe representación de un búho en una de las vasijas halladas en Potrero Tenorio y quizás el hallazgo más emblemático es el “chumpi ruricancho”, elemento textil hallado en Canto Chico hace cuarenta años y cuyo estado de conservación es admirable. Corresponde a una faja de 2.25 por 0.8 cm de ancho que representa una secuencia repetida de aves en combinación de colores.

Faja Ruricancho, extraordinario hallazgo textil del sitio Canto Chico (Foto Julio Abanto, 2020)

Nuestros cerros combinan paisaje, ecología y arqueología, es ese mundo que tratamos de mantener como ámbitos sagrados y culturales, es el caso de Cerro San Jerónimo, uno de los ecosistemas de lomas más importantes de Lima.

Las lomas costeras son el resultado de la interacción entre factores de clima, suelo, relieve; adoptan diversas formas y composiciones. Este ecosistema se caracteriza por presentar formaciones vegetales únicas y condiciones ambientales extremas. Por tales razones, la flora y fauna han desarrollado diversas adaptaciones para sobrevivir en condiciones tan extremas.

El cerro San Jerónimo es el Apu que une a los distritos del Rímac, independencia y San Juan de Lurigancho cubierta por vegetación estacional conformando las más de 250 hectáreas que corresponden al ecosistema frágil Lomas de Amancaes.

Cerro San Jerónimo y sus lomas (Foto Julio Abanto, 2018)

Siendo un santuario no sería raro que en San Jerónimo nos encontremos con otras aves veneradas en el pasado, desde aguiluchos, gavilanes hasta el rápido y hermoso cernícalo. Nuestro agradecimiento a Jorman Cabello y al equipo de Haz tu Mundo Verde por contribuir con imágenes de las aves presentes en estas lomas.

Para esta tercera entrega hemos querido mostrar algo sorprendente el avistamiento de cóndores en la zona alta de la quebrada, en las alturas de la montaña sagrada de Lima, nuestro cerro Colorado.

Desde 2016, teníamos noticas que se habían visto cóndores en los cielos del Colorado Norte, gracias a las imágenes proporcionadas por Juan Pardo (UFIS Perú) y Roberto Peña Terry incansables caminantes de las alturas de Lima podemos mostrarles el avistamiento de una pareja de cóndores que dominan un territorio libre de humanos que va desde quebrada Mito Dulce (Carabayllo), Huaycoloro (Huarochiri) y la cumbre de nuestra montaña. La noticia  es sorprende ya que contribuye a entender la distribución de estas enormes aves, las cuales eran comunes e nuestro ámbito como lo reporta para el siglo XVII Santiago de Cárdenas quien las estudiaba desde la cumbre de cerro San Jerónimo, según lo referencia Irma Franke (2015) y donde su presencia actual se registra en el valle de Santa Eulalia.


13. Cóndor andino (Vultur gryphus)
Es quizás una de las aves más impresionantes del mundo, en realidad pertenece a la familia de aves de rapiña llamadas vultúridas. Es una de las más grandes con capacidad de volar y puede alcanzar una altura superior a los 6000 msnm, su longevidad llega hasta medio siglo, según referencias antiguas eran vistas en los cerros colindantes a la capital. Su reciente avistamiento en las cumbres de la zona norte de cerro Colorado nos permite incluirla en esta reseña.

Demás está decir, que presenta fuertes garras, un enorme pico curvo, un plumaje negro y en el macho destaca un “collar” de plumas suaves y blancas. En algunos países andinos su reducido numero es  alarmante.

Majestuoso cóndor volando entre las alturas de Cerro Colorado y Cerro Inga (Fotos cortesía de Juan Pardo, Roberto Peña y Alinda Eliana, noviembre 2018)

14. Gallinazo cabeza roja (Cathartes aura)
Se trata de un ave grande, al igual que el cóndor y el gallinazo cabeza negra se alimenta de carroña, su presencia cubre casi todo el continente, característico es su plumaje marrón negruzco con plumas blancas en las extensiones de las alas, su cabeza carece de plumaje y presenta una coloración roja. En nuestro distrito  las hemos visto en la ribera del rio, en la zona de Campoy y en las alturas de cerro Cantería sobre los 1200 msnm.

Gallinazo cabeza roja (Fotos Julio  Abanto, 2016)

15. Gallinazo cabeza negra (Coragyps atratus)
El buitre negro americano es una de las aves más comunes de nuestra ciudad capital, más allá de su aspecto poco agradable su labor como limpiadores del ambiente les da una relevancia dentro de la ecología urbana. Debe su nombre a la coloración totalmente negra de su cuerpo, salvo las puntas de sus alas que lucen de color blanco. Es un ave de costumbres gregarias extendiendo su presencia desde el sur de Estado Unidos y gran parte de Sudamérica. 

Para algunos el gallinazo cabeza negra está representado en el escudo de la ciudad de Lima. Las de esta foto, son dos ejemplares "Tuco y Tica", las cuales descansan en la ventana de mi oficina y se han convertido en íntimos amigos de mis soledades. (Fotos Julio Abanto 2020)
16. Lechuza terrestre (Athene cunicularia)
Ocupante habitual de las quebradas libres de población, nuestras lomas y las huacas, la lechuza es un depredador de insectos y roedores. De plumaje generalmente pardo con manchas blancas, se reconoce por su cabeza redonda y su mirada frontal de enormes ojos y entre ellos un pico bastante curvo.  Vive en madrigueras que cava sobre el suelo o entre las rocas y  lo comparte con su pareja o pequeños grupos. 

Pareja de lechuzas captadas en las laderas de cerro Mentira en el abra a Collique, Anexo 22 (Julio Abanto 2016)

17. Gavilán acanelado (Parabuteo unicinctus)
Estos ejemplares que vuelan por todo el distrito tienen predilección por ocupar las zonas de Lomas. Presentan un característico plumaje marrón, una cola oscura, fuertes garras y un típico pico curvado color amarillento en la base y negro hacia la punta. Son aves muy territoriales alcanzan una longitud de 70  cm.

Gavilán acanelado, el señor de lomas El Mirador (Fotos Jorman Cabello) 


18. Aguilucho pecho negro (Geranoaetus melanleucus)
Una de las aves rapaces más hermosas de nuestros cielos su imponente aspecto se debe al plumaje  gris oscuro que se distribuyen desde el pecho, dorso y el vientre colar blanco. Alcanza una longitud de 70 cm, se lo puede visualizar solo o formando pequeños grupos.

Imponente vuelo del aguilucho pecho negro (Fotos Jorman Cabello y Julio Abanto, 2017)

Referencias:

Carlson Uwe, 2010. Iconografía Andina Interpretación del simbolismo en antiguos tejidos peruanos. En: Boletín de Lima N° 158 y en  http://uwe-carlson.com/wp-content/uploads/2018/03/Interpretaci%C3%B3n-del-simbolismo-en-antiguos-tejidos-peruanos1-1.pdf

GARCÏA CHINCHAY, Gerardo 2005. Topónimo e Historia. Estudios etnolingüísticos de San Juan de Lurigancho, Jicamarca y Mangomarca. Lima. Instituto Cultural Ruricancho. Fondo Editorial IEP El Triunfo. Editorial Bracamoros.

Franke Irma, 2015. El Cóndor Andino en el Perú. Poblaciones y Reproducciones. En:
http://avesecologaymedioambiente.blogspot.com/2015/01/el-condor-andino-en-el-peru-poblaciones.html.



domingo, 12 de abril de 2020

Aves de San Juan de Lurigancho, parte 2: El hermoso canto de las mañanas.


Lic. Julio Abanto Ll.

Nuestro distrito no deja de sorprendernos con la variedad de pájaros que posee (Composición de Fotos: Julio Abanto,2020) 


Según la ciencia, las aves son descendientes de los dinosaurios y así han evolucionado para conquistar casi todo el planeta, inclusive parte de los océanos. Nuestro país es un espacio privilegiado en diversidad con un registro de 1800 especies nos convierten en el segundo territorio con mayor número después de Colombia y por la variedad ecológica es lógico que su registro siga en aumento. El libro: “100 aves de Lima y alrededores” de Alejandro Tabini y Juan Paz-Soldán (2007), nos relata que, solo en el departamento de Lima se cuenta con un registro de 300 especies de aves.

Nos podemos dar el lujo de encontrar hasta fósiles de ellos. En el desierto de Ocucaje (Ica) y Sacaco (Arequipa), los paleontólogos han descubierto nuevas especies de aves marinas prehistóricas, algunas enormes dimensiones y que vivieron hace más de 10 millones de años.


Fósiles de aves desde el más famoso, el Archaeopteryx (Tomado de: https://www.magnoliabox.com/products/archaeopteryx-fossil-aamk001006 ) y las aves descubiertas en el desierto sur del país (Tomado de: http://soloparaviajeros.pe/cientificos-descubren-tres-nuevas-especies-extintas-relacionadas-a-las-historicas-aves-peruanas/  y https://www.sandiegouniontribune.com/sdut-lt-peru-fossil-022709-2009feb27-story.html) 


Tanto desde el litoral, los valles interandinos, inclusive los lugares más elevados de los Andes se gozan con el vuelo imponente del cóndor y nuestra amazonia es el lugar perfecto para encontrar hasta especies endémicas como el gallito de las rocas (Rupicola peruvianus).

Volviendo a nuestro distrito, en la lectura anterior les comenté que existen hábitats donde con tranquilidad podemos avistar aves. El birdwatching o avistamiento de aves es un pasatiempo que cada vez gana mayores adeptos y que el turismo ha sabido sacar provecho. En San juan de Lurigancho se puede lograr encontrar espacios donde existe cierta cantidad de árboles o donde sencillamente el hombre no invade lugares naturales.

Si bien nuestro río Rímac se observa muy contaminado un poco al interior desde la bocatoma de la Atarjea hasta el puente Huachipa, SEDAPAL ha creado la denominada Zona de Reserva Ecológica del Río Rímac, un área de amortiguamiento para evitar la contaminación de las orillas logrando conservar un monte ribereño y un buen caudal de agua, es allí donde uno puede fotografiar garzas, gaviotas, gallinazos y una que otra especie migratoria. También hice mención a parques grandes como el Huiracocha, el bosque de Caja de Agua; especialmente al interior de Mangomarca, un vecino, desde hace años tuvo la idea de crear un Bosque. El bosque de Misael es un lugar ideal para fotografiar hermosos pájaros que vienen a visitar las lomas que cubren de vegetación más de 400 ha de cerro.


Bosque de Misael, en Villa Mangomarca, hermoso espacio que es a la antesala a la reconocida quebrada Lomas (Foto Julio Abanto 2015)
Quebrada adentro todavía existen lugares no habitados, estos están relacionados a las faldas y cumbres de cerro Colorado, lugar donde crecen “los gigantones” (Neoraimondia roseiflora), enormes cactus que dan cuenta que estas entrando a la sierra de Lima y entre cuyas enormes columnas anida la tórtola orejuda, y sobre los cielos de la imponente montaña existe el registro del cóndor.

A continuación, hago entrega de seis especies más, mayormente Columbiformes, grupo que esta representados por palomas y tórtolas.

7. Paloma doméstica (Columba livia)
Considerada por muchos como una plaga y transmisor de enfermedades, la paloma doméstica forma parte del paisaje urbano, es infaltable en plazas y catedrales de la capital. Rescatando aspectos interesantes de esta ave, las palomas son animales bastante inteligentes y con un buen sentido de orientación, en algunos lugares se crían, reproduciéndose muy rápidamente a pesar que siempre que anida solo ponen dos huevos, su crianza es tan amplia que existe una gran variedad.

Paloma doméstica, una de las abundantes de nuestra ciudad (Foto: Julio Abanto, 2020)

 8. Tórtola orejuda (Zenaida auricolata)
Menos abundante que la tórtola melodía y de mayor tamaño que la tortolita peruana, es reconocida por el color de su plumaje en tonalidades cremas y grises, presenta unas características manchas oscuras detrás de los ojos y en las alas. Las he visto con frecuencia al interior de las quebradas de la zona alta de Cantogrande donde se refugian en los enormes cactus y se alimentan de granos y semillas.


Tórtola orejuda, de costumbres solitarias se le observa en zonas periurbanas (Foto: Julio Abanto, 2017)

9. Tórtola melódica (Zenaida meloda)
Debe su nombre al canto matutino tan característico el cual le da otro nombre cu-cu-li. El color del cuerpo es marrón grisáceo, con alas de bordes blancos y terminaciones en plumas oscuras. Además de sus patas rojas muy característico es el aro de piel azulada que rodea los ojos.

 
La tórtola melódica, también conocida como cuculi (Foto: Julio Abanto, 2020)


10. Tortolita peruana (Columbina cruziana
Pequeña paloma de color marrón grisáceo, las alas con puntos negros y la cola termina también en color negro. El macho presenta una coloración gris en la cabeza, su pico es oscuro en la punta y anaranjado en la base. Alcanza una longitud promedio de 18 cm desde la cola hasta la cabeza.

La tortolita peruana, presente en toda nuestra costa, hasta los 2400 msnm. (Foto: Julio Abanto 2020)

11. Tordo (Dives warszewiczi)
Ave de plumaje, pico y patas totalmente negro, los machos tienen un color más brillante y azulado. Es de regular tamaño pues suele alcanzar hasta los 30 cm. Por lo general se los ve solos o en pareja, destaca su canto que es variado y agradable. Suele alimentarse en los árboles de semillas, grutas, insectos e incluso el huevo de otros pájaros.

El tordo, pájaro de hermoso y sonoro canto (Foto: Julio Abanto, 2020)

12. Semillerito negro azulado (Volantinia jacarina)

También conocido como “saltapalitos” debe este nombre al comportamiento del macho en periodo de celo, el cual da unos saltos perfectamente verticales haciendo un canto muy peculiar. El macho presenta un plumaje negro azulado y la hembra un plumaje marrón grisáceo entremezcladas con beige. Se alimenta de semillas y por lo general tiene un tamaño de 12 cm.

El semillerito, macho y hembra (Foto: Julio Abanto, 2020)




lunes, 6 de abril de 2020

Aves de San Juan de Lurigancho, parte 1:La experiencia de fotografiarlas desde la ventana en plena cuarentena.



Lic. Julio Abanto Ll.

Un mosaico de fotos de la primera entrega de aves fotografiadas en nuestro distrito (Fotos: Julio Abanto Ll.)

Siempre he sido un apasionado observador de la fauna silvestre, claro cuando era niño nuestro distrito no era tan urbano como lo es ahora, entones se disfrutaba de un monte ribereño, espacios rurales en Campoy, humedales en Huachipa, un amplio bosque en Caja de Agua, quebradas y pampas desérticas, así como cerros libres de población que en invierno se cubrían de vegetación, las mismas huacas eran interesantes lugares de observación. La ciudad le ha quitado espacio a la naturaleza y en consecuencia algunas especies de animales han tenido que adaptarse o sencillamente desaparecer.

A mi hermano y a mi nos encantaba jugar con unos escarabajos muy lindos que le decíamos “caballito de siete colores” (Tetracha sobrina), nunca más los he visto. También recuerdo que para una clase de ciencia tuve que disecar el sapo que encontramos en el corral de patos de mi amigo Willy Arias, estos batracios aparecían en los jardines, cerca de la acequia que circulaba por gran parte del ámbito poblado de nuestro distrito. La última vez que vi un sapo, un enorme bufo, fue en el parque zonal Huiracocha era el año 2011, y di la orden que nadie lo tocara y lo devolviera al charquito donde lo habíamos encontrado, sin duda un sobreviviente y es que trabajar en el parque me hizo reflexionar sobre la importancia de devolver áreas verdes a nuestros pequeños hermanos de este caótico mundo.

El Parque es un mundo muy especial un ámbito de casi treinta hectáreas que le devuelve a la naturaleza un pequeño espacio y que conocerlo desde la mañana hasta que oscurece le permite a uno entrar a un mundo donde la ciudad no tiene lugar. La laguna artificial y su isla por las noches son el refugio de aves migratorias como el chorlito gritón y los peces que abundan en sus aguas (tilapias, guppys y carpa koy), se habían convertido en el alimento de la garza blanca, la garcita estriada, la garza guaco y por las mañanas una enorme águila pescadoras que llevaba entre garras un enorme pez de casi dos kilos. También encontré guerequeques, chotacablas y en algún momento un ave muy rara que apareció muerta en la zona de las piscinas se trataba de un Oceanictes gracilis ave de costumbre marinas muy poco conocidas. Así contacté a la bióloga Cinthya Romero, quien trabaja en el Museo de historia Natural y a quien le estregué esta ave y otra más. Esto nos llevó a visionar con mis trabajadores cómo queríamos el parque y no pusimos el reto de otorgarle al Huiracocha 1800 árboles y así fue, lo que inicialmente parecía un campo de golf hoy tiene bosquecitos donde usted, las aves y miles de insectos pueden gozar el derecho a ser parte de este planeta.

Parque zonal Huiracocha, presenta diversos habitad donde uno puede deleitarse observando aves (Foto Julio Abanto, 2019)

Y si de encontrar lugares donde gozar de la naturaleza se trata, nuestro afán nos ha llevado a movilizar intensiones y por eso, desde hace años se lucha por la defensa de las ultimas lomas de esta parte de Lima y las conservaciones de la zona alta de Canto Grande, idea que motivó a crear la Reserva Arqueológica de Canto Grande, 53 km 2 de área que protege un hermoso santuario, paisaje y quebradas que se activa en épocas de fuertes lluvias, ahora con la intervención del ministerio de Cultura se plantea un mejor manejo para esta situación. Nuestras lomas al menos una de ella ya puede ampararse como zona protegida, pero falta mucho más.


Quebrada Media Luna, parte del inicio de la sierra de nuestro distrito, uno de los pocos lugares sin ocupación humana (Foto: Julio Abanto, 2017)

Volviendo a las aves, aún es posible maravillarse con su observación. ¿Y dónde  puede hacerlo?, si deseas perennizar el momento y no como la hacia mi pata Lorenzo, un muchachito muy diestro con la honda, pues como se dice donde ponía el ojo no había nada que se salve de su habilidosa puntería y es que he sido testigo de cómo batía un colibrí en pleno vuelo sin causarle mayor daño, su destreza era increíble, recuerdo que una vez nos fuimos a caminar y de un solo proyectil desde su honda de purito caucho pudo bajarse dos palomas, así de extraordinario era Lorenzo que a pesar de semejante talento decidió de grande darle otro tipo de tiros a su vida.

Mas hermoso que capturarlas es fotografiarlas. Cuando era niño no tenía esa posibilidad, tendrías que tener una cámara reflex con un buen teleobjetivo lo cual era impensable. Ahora la cosa ha cambiado, las cámaras digitales e incluso un celular ayuda mucho al propósito de fotografiar lo que uno desee. Y es que, si se trata de responder dónde puedo observar  aves, primero debemos pensar que tipo de aves nos interesa. Nuestro distrito tiene muchos escenarios interesantes, está el mismo río Rímac entre la zona de Campoy hasta Huachipa, el bosque de Caja de Agua, el parque zonal Huiracocha, las Lomas de Mangomarca o sencillamente tu jardín si este cuenta con un par de árboles y flores que animen la presencia de colibríes, es más, esta nota  lo hago con imágenes que he fotografiado desde mi ventana al jardín de mi calle, aprovechando las lindas y frescas mañana de esta cuarentena.

Otra pregunta importante es ¿conocemos los hábitos de los aves y pájaros que deseamos fotografiar?, por ejemplo, alguna tiene mucha actividad por las mañanas y otras aparecen al atardecer también existen aquellas de costumbres nocturnos y existen aves que aparecen por temporadas. Otro aspecto es la casualidad y la habilidad de fotografiarlas aun con el celular.

El siguiente texto solo trata de dar cuenta del reporte de hermosos encuentros con estos animalitos, no trata de ser una guía, pero si deseamos contribuir a la reflexión y lo importante que es devolverle a la naturaleza un pequeño espacio, la armonía tiene que ver con el equilibro de cómo hacemos nuestras cosas mientras estamos vivos y lo bien que lo podemos hacer pensando en el futuro y en quienes nos rodean.  

1. Amazilia Costeña (Amazilia amazilia)

Es uno de los colibríes más comunes en nuestra ciudad, en promedio mide 10 cm, muy activo durante la mañana vuela buscando néctar de las flores de los jardines, algunos bien intencionado colocan nectarios en sus arboles para ayudar alimentar a estos animalitos. Además del color marrón de tono canela presenta un verdusco metálico, algo característicos en el color rojizo de su pico hacia la base y luego negro hasta la punta.

Colibri  Amazilia Costeña. uno de los mas comunes en nuestros jardines y parques (Foto Julio Abanto, 2020)

 2. Colibrí Cora (Thaumastura cora)

Algo más pequeña que la amazilia costeña, su plumaje mayormente verde. Llama la atención las plumas largas de su cola, las cuales le crecen al macho cuando entre en periodo reproductivo.

Colibrí Cora, llama la atención las plumas largas típica en los machos (Foto Julio Abanto, 2020)

3. Gorrión casero (Passer domesticus)

Es uno de los pájaros más comunes en la ciudad, sin embargo, su origen es europeo de introducción reciente. Es característicos su plumaje marrón con tonalidades oscuras alrededor de los ojos y el pecho, el pecho y vientre color crema un largo aproximado de 16 cm.
 
Gorrión macho y hembra, entre los mas abundantes de nuestra ciudad (Foto : Julio Abanto 2020)


4. Chiringue azafranado (Sicalis flaveola)

Es común verlo por las mañanas en el suelo, en grupos pequeños alimentándose de semillas, destaca su hermoso plumaje amarillo brillante y una mancha un plumaje anaranjado en la frente. El plumaje de las alas es de tonos oscuros, la longitud desde la cola es de 14 cm.

Pajarito de hermoso color amarillo (Foto : Julio Abanto 2020)

5. Cucarachero común (Troglodytes aedon)

Pequeño pájaro de cuerpo rechoncho, de plumaje color marrón y el pecho más claro, las alas y la cola presentan pequeñas rayas oscuras: Se alimenta mayormente de insectos. Mide 12 cm.

El Cucarachero, un devorador de insectos (Foto : Julio Abanto 2020)

6. Reinita mielera (Coereba flaveola)

Uno de los pajaritos más hermosos que uno puede avistar, destaca el color amarillo de todo su pecho y vientre, el lomo; cabeza y una franja que va del pico los ojos y el cuello en color gris, sobre los ojos una franja blanca lo mismo que toda su garganta. Se alimenta picando las flores para extraerles su néctar. Su tamaño promedio es de 10 cm.

Vistoso pájaro, se alimenta del néctar de la flores. (Foto : Julio Abanto 2020)